Agilidad: ¿un deporte para todos los perros?
La agilidad es uno de los deportes caninos más populares del mundo. Su popularidad se ve ampliamente difundida por televisión. Es un deporte increíble para ti y tu perro, que crea un vínculo aún más profundo. Pero ¿es este deporte de fama mundial adecuado para todos los perros?
Agilidad: comprender los fundamentos
La agilidad es un deporte canino en el que guías a tu perro a través de un circuito de obstáculos predeterminado en un tiempo establecido. Los circuitos suelen tener entre 14 y 20 obstáculos, que pueden incluir túneles, postes, saltos, balancines y mesas de descanso donde el perro debe detenerse durante un periodo determinado. En cada prueba, tú y tu perro recorréis circuitos únicos diseñados específicamente para ese día. Todo esto se realiza con tu perro, guiándote únicamente por las señales y el lenguaje corporal que utilizas para dirigirlo. Este deporte se inspiró en los circuitos de obstáculos del mundo ecuestre.
Básicamente, todas las razas, incluidas las mestizas, pueden participar en competiciones de agilidad, desde el perro más pequeño hasta el más grande.
Asegúrate de que el agility sea adecuado para tu perro.
Como en cualquier deporte, debes asegurarte de que tu perro esté motivado para realizar la actividad contigo. Es fundamental que confíe en ti. Además, hazte algunas preguntas como:
- ¿A tu perro le gusta correr?
- ¿Se lleva bien con otros perros?
- ¿Le sobra energía?
Además, para participar en las clases de agility, su perro debe:
De 15 meses de edad o más .
De hecho, comenzar antes de esta edad conlleva el riesgo de interrumpir el crecimiento del perro y, por lo tanto, causarle graves daños a largo plazo. Saltar, girar y aterrizar de forma torpe puede tener consecuencias que a veces son graves, si no irreversibles. Por lo tanto, es importante minimizar los riesgos asociados con comenzar deportes caninos demasiado pronto. Los perros que participan en deportes caninos son atletas, pero antes de poder serlo, deben ser adultos. Hay muchas cosas que enseñarle a un perro antes de los 15 meses de edad, como mantener la calma y no meterse en líos. Lo mejor es centrarse en lo básico antes de comenzar cualquier deporte.

Su perro debe estar en buen estado de salud y con las vacunas al día .
La salud de un perro de deporte es fundamental. No le harías correr una maratón a alguien con asma o artritis severa. Lo mismo ocurre con los perros. Un estado de salud excelente es la base de cualquier deporte canino. Lo mejor es consultar con un veterinario especializado en perros de deporte para obtener la orientación adecuada. Por ejemplo, podrá comprobar que tu perro no tenga un soplo cardíaco.
La complexión de tu perro debe ser adecuada para este deporte .
Los perros braquicéfalos o de hocico corto suelen tener más dificultades para respirar. Con frecuencia presentan fosas nasales estrechas y vías respiratorias parcialmente obstruidas, lo que les dificulta la respiración al realizar esfuerzos. Las razas más grandes son propensas a la displasia de cadera y la artritis. Si su perro tiene sobrepeso, deberá ajustar su programa de entrenamiento para evitar que se sobreexija.
Pero el entrenamiento de agility no se centra solo en tu perro. Tú eres fundamental. No necesitas ser un velocista de élite para practicar agility con él, pero sí debes ser capaz de seguirle el ritmo en el circuito. Desarrollando una buena comunicación, tú y tu perro podréis convertiros en los mejores compañeros en este deporte.
Practica en casa utilizando tu propio equipo.
Asegúrate de que tu perro no se estrese en entornos desconocidos y ruidosos. Acostúmbralo gradualmente y, sobre todo, de forma positiva. Este es un trabajo importante que no debes descuidar, ya que ayudará a tu perro a afrontar el entrenamiento con confianza. Esto es especialmente cierto si en el futuro quieres participar en competiciones.
Tanto si asistes a clases en un club como si no, continuar el entrenamiento de tu perro en casa es fundamental. ¡Practicar en casa es igual de importante! Puedes crear tus propios obstáculos. Puedes construirlos tú mismo o comprar el material por internet. Lo importante es crear obstáculos o circuitos seguros para tu perro.
Dedica al menos 15 o 20 minutos al día a practicar los movimientos aprendidos en el entrenamiento. Considera usar incentivos como premios o juguetes para mantener a tu perro entretenido durante todo el recorrido. Tómate tu tiempo, sobre todo al principio, mientras ambos se acostumbran al ejercicio. Es mejor practicar un poco con un solo obstáculo que intentar con demasiados y arriesgarte a arruinar la sesión.
En resumen, la agilidad es un deporte excelente para mantener o desarrollar el vínculo entre el dueño y su perro . Si bien ningún perro está excluido de este deporte, se recomienda precaución. Un perro demasiado joven o enfermo podría ponerse en peligro en la pista o sufrir lesiones irreversibles.